Ficha Técnica
*Paula Mercedes Flores Ramos
*Profesora
*Coordinadora General del Centro de Capacitación Laboral “Capacitación y Trabajo” (CECAL)
*Ex Directora de Educación Gobernación Territorio Federal Amazonas
*Juan Pablo Flores su hijo del alma
Por Nelson Ventura, Rossana Foresto y Alejandro Benítez.
Puerto Ayacucho 31/5/2023
La frase
“Los mejores alumnos son los que aman
su profesión y siempre están dispuestos a servir”
La profesora Paula Flores.
Es un personaje de la educación amazonense, miles de personas, profesionales y técnicos o no, fuimos sus alumnos desde la década del 70. Un símbolo moral, ético, cívico y humano resume su carrera de docente por más de 50 años, que ha dejado huellas imborrables en la formación ciudadana amazonense.
Centro de capacitación y trabajo
El centro de Capacitación Laboral patrocinado por la Asociación Venezolana de Educación Católica (AVEC) que coordina desde el año 2012 ofrece oficios de corta duración a los más desfavorecidos, por lo general a las poblaciones de la periferia de la ciudad, este día entregaron certificados en el Alto Carinagua por cursos sobre tejidos de chinchorros y bisutería. La oficina que coordina, organiza los talleres que solicitan las propias comunidades. En esta labor han atendido a los siete Municipios del estado Amazonas, las principales actividades han sido en chinchorros en todas sus modalidades, tejidos a mano, en telar; corte y costura y fabricación de bongos. Todos estos cursos se dictan con recursos humanos de la propia comunidad, informó.
El amor por la docencia
En principio ser docente estaba lejos de sus aspiraciones, se graduó de bachiller en Caicara del Orinoco, inicio sociología en la Universidad de Oriente, sin concluir vino a Puerto Ayacucho y el profesor Josué Monsalve, director de educación para entonces, le consiguió unas horas en el Liceo Santiago Aguerrevere, allí adquirió el compromiso, la responsabilidad y el amor por la docencia; tenía que dar lo mejor de si misma, se asesoró en pedagogía, didáctica y demás materias requeridas para enseñar, así comenzó desde 1970, se formó posteriormente y aun esta activa, cuando no está en la educación formal, está en la no convencional, aseveró.
Los momentos de gloria
Para Flores, son innumerable los momentos de gloria en su larga carrera de educadora, dice que dinero no tiene y afirma que su mayor riqueza, su mayor gloria es el afecto de sus alumnos, de los representantes y de los hijos de los ex alumnos a quienes le han inculcado a sus hijos “mi profesora” mis nietos educativos, expresó sonriente.
Los mejores alumnos son los que aman su profesión
Los mejores alumnos son los que llegaron o lograron una carrera técnica o universitaria y que se han entregado desde su profesión a prestar un servicio, mis mejores alumnos son los que aman su profesión, que están por vocación y siempre dispuesto a prestar un servicio, allí radica lo que he asumido, la educación como la prestación de un servicio, manifestó.
Encontrarse a los ex alumnos es lo máximo.
Hace un suspiro de satisfacción, el encuentro con los ex alumnos es de lo más maravilloso, ese abrazo tan afectuoso, ese cariño que me manifiestan y transmiten, sus palabras de estímulos, le dicen, profesora tan linda como siempre, sonriente, alegre, con esa ternura, eso es lo máximo, confesó.
La mejor época para educar
Nos cuenta la profesora que las cosas cambian, sin desmerecer la educación actual, da gracias a Dios por haberle tocado dar clase en otra época y no ahora. Ahora muchos le tienen miedo a los alumnos, si usted pone un poco de disciplina, lo denuncian, criticó.
Los jóvenes tienen que conocer de valores
Los jóvenes de hoy fundamentalmente tienen que saber y conocer de valores, allí juega un papel importante la familia, la profesora dice no saber si ahora los valores se convirtieron, pero lo cierto es que no están en el sitio que corresponde a los valores y de esos valores se aprende a ser un buen ciudadano. En el tema de los valores entra a la perfección el método preventivo de Don Bosco, razón, religión y amor, los tres pilares fundamentales destacó.
Enseñar a amar.
En base al amor es que se tiene que educar y enseñar, refiere que sobre eso Antonio Pérez Esclacrin, dice que educar es enseñar a amar, para que una educación de verdad sea efectiva y el producto de ella sean ciudadanos felices, aseguró.
Practicar la fe y la esperanza
Desde la concepción de educadores, sembradores, forjadores, moldeadores de las mentes juveniles, no podemos ser pesimistas, como profesionales siempre hay que tener e irradiar esperanza, siempre hay una semillita que germinará y servirá para que se pueda ayudar y apoyar a otro y que cambien realmente las cosas. Desde el punto de vista religioso, que es una parte esencial de su vida, el hecho de saberse hija de Dios sabe que lo tiene todo, con obstáculos, limitaciones, con las dificultades que estamos viviendo, pero tenemos a Jesús que prometió estar con nosotros hasta el fin del mundo y el cumple sus promesas, tenemos que ser optimistas, tener esperanza, tener fe y por su puesto practicarlas y traducirlas en obras, por lo que al fin y al cabo seremos juzgados, por las buenas o malas obras que hagamos, apuntó.
Los mejores momentos
Nuestra entrevistada recuerda de manera especial con mucho cariño y satisfacción los momentos maravillosos de su vida que le han proporcionado sus alumnos. Ha tenido muchos reconocimientos a nivel regional, nacional y la del Papa San Juan Pablo Segundo. De los momentos como docente recuerda cuando el Dr. Luis José González Herrera, la nombró Directora de Educación, tuvo la oportunidad de recorrer todas las escuelas del estado, Rio Negro, Maroa, Atabapo, Alto Orinoco, cuenta que llegó hasta Huachamacare por el río Orinoco, fue por el Cunucunuma, Akanaña. En el Padamo después de subir el barranco, todos la esperaban, izaron la bandera y entonaron el Himno Nacional. En todo el trayecto del Cunucunuma o Akanaña a Culebra, disfrutó de una gran cantidad de saltos por los que se le salieron las lagrimas de emoción y agradecimiento a Dios por permitirle contemplar tanta belleza, son momentos inolvidables, me sentí Neil Astrong cuando agradeció que estaba en la luna, no todo el mundo tiene la dicha de ver esos paisajes tan extraordinarios, relató.
Empezar por nosotros mismos
Para rescatar la ética necesaria tenemos que empezar por nosotros mismos y eso se irradia de a poquito, no vamos a convencer a todo el mundo, pero tenemos que empezar por nosotros mismos y ser testimonios de lo que decimos y eso va sumando poco a poco y además contamos con el que todo lo puede, para quien no hay nada imposible. Concluyó.